Cuando se está creando una web o se tiene ya una y se quiere mejorar la conversión de la misma hay unos puntos importantes a tener en cuenta. Uno de ellos es revisar el tipo de formulario activo en la web sobre la contratación de productos o servicios o, por el contrario, para la inscripción a la página.
Los formularios, son herramientas de conversión que se implantan en una web y que ayudan a cumplir un objetivo, ya sea la venta de un artículo o la suscripción de algún cliente en una zona específica en la que se ofrezca un contenido de valor que le haya interesado al usuario.
¿Por qué necesitamos un formulario en la web?
Los formularios son, por excelencia, el medio de interacción existente en la página web o en la landing page, si eso es lo que tenemos "en abierto" en esos momentos. A través de ello se pueden llevar a cabo grandes acciones como compras, registros, descargas, suscripciones y un gran número de leads, tantos como se quiera llegar a generar en esa página de aterrizaje en ese preciso momento.
Muchas de las web que tienen presencia online no poseen buenos formularios y por eso no llegan a mantener un gran ratio de conversión. Los impresos que no tienen una buena usabilidad o los que no terminan de tener una experiencia de usuario satisfactoria desembocan en que esa conversión nunca llegue: muchas veces tienen una estructura bastante compleja y hacen que el usuario cometa errores al rellenarlo.
Lo que debemos ofrecer al usuario son formularios muy sencillos y simples de entender, ya que es una parte importante de la web y, sin embargo, a la que menos importancia le damos. Una usabilidad alta nos ayudará a terminar generando algo. Para saber el tipo de usabilidad que tiene nuestro impreso, hasta una persona que no tenga ningún manejo de internet debe de intuir cómo rellenarlo y enviarlo.
¿Cuáles son los puntos más importantes para maquetar un formulario?
Los principales puntos para maquetar formularios sencillos son:
1. Indicar si los campos son obligatorios o no en el formulario
Siempre se debe indicar cuáles son opcionales y obligatorios para no provocar confusión o indecisión en el usuario a la hora de rellenarlo. Para indicarlo, por ejemplo, puede ponerse entre paréntesis la palabra "obligatorio" o un asterisco (*) en los campos que sean obligatorios.
2. No pasarse con el número de campos
Cuántos más campos tenga, menos conversiones se harán. Debemos pensar como un usuario más, y saber de primera mano que si nos pidieran muchos datos, no terminaríamos de rellenarlo. Eso mismo puede pasar con el nuestro; debemos omitir datos que no sean necesarios y hacerlo claro y conciso. Cuantos menos datos, más conversiones.
3. Nada de poner diferentes acciones en la misma pestaña
Un ejemplo sería hacer una reserva o cancelarla y modificarla. Conviene tener dos pestañas diferentes para no confundir al usuario y, mucho menos, perderlo. Haciendo dos pestañas damos visibilidad a ambas opciones y facilitamos la comprensión de nuestro cliente.
4.- Diseño sencillo.
Tal y como hemos comentado en los campos del impreso, igual debemos hacer en el diseño. El aspecto debe ser fácil visualmente, por lo que es buena idea reducirlo y simplificarlo siempre que se pueda y dentro de las posibilidades que tengamos dentro de nuestra web. Resulta muy relajante visualmente mantener una alineación de los elementos y una coherencia de colores, tanto en la tipografía como en el tema de esa pestaña. Así mejoramos la dirección focal de la vista en la lectura y evitamos que el usuario abandone nuestra página.
5. Campo ancho
Los casilleros que debemos poner para rellenar los datos, deben de tener el suficiente espacio para poder rellenar cómodamente los datos y visualizar rápidamente si falta alguno. Lo mínimo: deben caber 20 caracteres, excepto los campos que deben ser pequeños porque vamos a meter un código postal o una fecha de nacimiento, por ejemplo. Esos sí deben de tener un espacio corto.
6. Rellenar una columna es lo mejor
El flujo de relleno de los formularios debe ser claro y conciso. La facilidad de transmitir es clave para la mayor satisfacción del cliente.
Al evitar los desplazamientos innecesarios, se puede mantener un flujo de lectura y escritura vertical, que es lo mejor para el usuario a la hora de rellenarlo. No debemos hacerlo nunca en apaisado ya que es más confuso y menos visual.
Lo más útil es crear una única columna para alinear todos los elementos a la izquierda o a la derecha y no crearlo a tres columnas, ya que aquí hay que desplazar varias veces la mirada. Evitar todo esto aumenta el nivel de conversión y da una mejor experiencia al usuario.
¿Has tenido que maquetar alguna vez un formulario, para ti cuál es la mejor maquetación de un formulario? ¿Cómo llamarías la atención del usuario para contactar contigo?
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