El diseño de nuestra página web tiene un efecto directo en el SEO. Apartados como la velocidad de carga, la arquitectura web o si nuestro site es responsive o no incidirán en el Page Rank que Google otorgue a nuestro sitio en las diferentes búsquedas que se lleven a cabo.
Por esta razón, W3C es un consorcio internacional que tiene como finalidad aportar una serie de recomendaciones y pautas para el diseño de nuestra página web, lo que, aunque parezca mentira, tendrá una incidencia directa en el posicionamiento orgánico.
¿Qué es W3C?
W3C no es más que el diminutivo del acrónimo de World Wide Web Consortium, también denominado Consorcio WWW en España. Esta cooperación internacional trabaja a tiempo completo tanto para el público en general como para los navegadores, con el principal objetivo de conseguir lo que se conoce como la interoperabilidad web. De esta manera se consigue que la World Wide Web sea capaz de funcionar en cualquier tipo de hardware o software a nivel mundial.
Esta iniciativa nació en 1994 con la autoría de Tim Berners-Lee, la persona que también fue responsable de crear URL, HTPP y HTML, por lo que viene de la mano de alguien que realmente conoce el sector.
Todas estas medidas están recogidas en un documento completamente gratuito. Además, el W3C pone a nuestra disposición cualquier tipo de recurso que nos permita desarrollar una página web que sea completamente accesible. Obviamente, todo el consorcio trabaja para estar a la última y, por tanto, si se producen cambios suficientes se acaba publicando una nueva edición.
¿Por qué es importante para el marketing?
Vivimos en un mundo realmente globalizado y hay personas que tienen diferentes tipos de discapacidad. Por ello, las personas ciegas realizan sus búsquedas por voz, algo que los buscadores están empezando a mejorar y a tener en cuenta a la hora de establecer su ranking de páginas web.
En este sentido, con este tipo de público se hace necesaria la importancia de establecer un estándar W3C y también realizar un contacto con un tipo de público que sin esta metodología sería imposible que pudiera conectar con nosotros.
De esta forma, establecer unos criterios de accesibilidad nos permitirá asegurarnos que puedan llegar a nuestro sitio web y, al mismo tiempo, nos genera cierta reputación positiva de cara al exterior.
Qué niveles existen
A día de hoy, existen diferentes niveles de W3C que son de obligado cumplimiento si queremos asegurarnos que nuestra página web sea accesible. En concreto, son tres, que van desde A a AAA. Sus características principales son las siguientes:
1. Nivel A: Es considerado el nivel básico de accesibilidad para una página web. Para ello, como desarrolladores del sitio web debemos verificar que todas las personas puedan acceder a ella. En caso que no se cumpla este nivel será imposible llegar.
2. Nivel AA: Es recomendable también cumplimentar este nivel en la página web. En caso contrario, los usuarios podrán acceder a la información, aunque en algunas ocasiones puede llegar a presentarse algún tipo de dificultad.
3. Nivel AAA: Básicamente es la suma de los dos anteriores. También es importante poder cumplir este nivel si se quiere marcar la diferencia con la competencia. De esta forma nos aseguramos de que ningún usuario pueda tener algún tipo de dificultad para acceder a la información.
Por otro lado, es importante verificar que para poder tener cada uno de los niveles se deben cumplir los siguientes criterios del W3C:
- Toda la página web: En este punto es importante incidir que no vale cumplimentar los niveles anteriores en algunas landings concretas. Es necesario que esté disponible en la totalidad de la página web.
- Procesos a nivel completo: En algunas páginas web puede ocurrir que formen parte de una serie de webs que cumplen con un proceso común. Por ello, en este caso también debe actuarse de forma similar.
- Uso de tecnología que no interfiera: Es importante garantizar la accesibilidad a todos los públicos en la página web. En este sentido, si se utiliza algún tipo de tecnología por la cual algún perfil de usuario no pueda acceder, se debe ofrecer algún tipo de alternativa. Al mismo tiempo, la tecnología no debe ser ningún tipo de problema, sino solo una solución.
Niveles de accesibilidad y su efecto en el SEO
Obviamente, cualquier nivel de accesibilidad que se consiga con los estándares de W3C tendrá efectos directos en el posicionamiento. Para empezar, a buen seguro, los procesadores de voz tendrán menos dificultades para entender lo que se conoce como contenido OK Google. De hecho, esta única mejora ya tiene una incidencia grande en el SEO porque los buscadores dan prioridad a las páginas web que respetan este tipo de estándares.
Al mismo tiempo, cuando trabajamos en este tipo de mejoras hemos de tener en cuenta que estamos eliminando todas aquellas líneas de código HTML que puede resultar innecesario para centrarnos en lo mínimo para ofrecer una página web lo más accesible posible. La velocidad de carga es otro de los criterios principales que Google toma en cuenta.
No debemos olvidar que la accesibilidad y el posicionamiento orgánico están interconectados, es decir, que factores que mejoran un factor también lo logran en el otro. Por ejemplo, los textos a modo de leyenda que aparecen debajo de una imagen o de un vídeo ofrecen una información extra, mientras que esto hace que los robots de Google lo indexen y así mejore el posicionamiento.
En este sentido, trabajar el SEO de una página web accesible nos obliga a modificar la forma en la que planteamos las estrategias de contenidos. Por ende, debemos entender que una persona ciega o que tenga algún tipo de discapacidad visual no buscará de la misma forma que el resto de usuarios. Al mismo tiempo, otra persona que no pueda utilizar el teclado también hará búsquedas de una manera completamente diferente. Por ello, las búsquedas por voz también deben ser un factor en el que depositemos nuestra atención.
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