¿Conoces el marketing saludable? | ACTUALIZADO

Hace un tiempo que estamos viendo cómo la vida saludable se está convirtiendo en tendencia, no solo para la gente más joven, sino para toda la población en general. Esto implica a todos los ámbitos de nuestra vida, desde la alimentación hasta los hábitos y las rutinas de nuestro día a día. Por ello, el marketing saludable se ha adaptado a estas nuevas necesidades, ya que es necesario transmitir lo que la población requiere.

Está claro que la salud es primordial y son muchos los medios que recalcan que hay que comer sano. Las empresas estudian cómo desarrollar diferentes estrategias mediante el marketing saludable para fomentar las prácticas alimenticias y el deporte, y así favorecer su imagen. Por esta razón, desde hace unos años se han puesto de moda las carreras organizadas por diferentes marcas.

Puede haber muchas estrategias de marketing, pero las que más llaman la atención son la colocación de los productos por colores, la publicidad que se emplea para determinar lo rápida que es su preparación, debido a que hay mucha gente que no dispone de tiempo para estar cocinando, o la información sobre la carencia de ingredientes no saludables como el aceite de palma. La finalidad de este tipo de publicidad consiste en identificar la necesidad del ser humano que le aporte salud y a la vez que suponga un ingreso rentable para la empresa.

¿Por qué el marketing saludable se ha convertido en tendencia?

Los productos saludables que se venden en el mercado son muy demandados por los consumidores, y las marcas lo saben. Por eso, publicitar los beneficios de los productos saludables, o dar salida a yogures con ingredientes naturales, son una de las mejores estrategias de posicionamiento en los buscadores Google.

El marketing saludable se ha convertido en tendencia porque la digitalización ha conseguido modificar los hábitos de compra del consumidor, y las empresas se encargan de promocionar productos y hábitos saludables contando con herramientas SEO para aumentar sus ventas y darse a conocer de forma rápida, económica y sencilla.

La venta por Internet ya está integrada en el presente como algo seguro, así como los canales de redes sociales y la colaboración de influencers. Estas personas, con conocimientos de informática y desparpajo innato, se dedican a grabar vídeos promocionando ciertos productos ofrecidos por las marcas y valorando su calidad y salubridad.

Aportan consejos y técnicas para modificar los hábitos alimenticios en el día a día y convertirlos en saludables, de la misma forma que la misma alimentación. Los profesionales de nutrición son los que más confianza transmiten en sus discursos y su forma de enseñar a comer sano, por eso las empresas apuestan por ellos.

Este tipo de publicidad sana está dirigida a todo tipo de personas. El mantenimiento del ecosistema, la alimentación saludable y los productos con ingredientes naturales son tendencia clara entre la generación de personas de 20 años sobre todo. Y como las empresas lo saben, se aprovechan de la situación fomentando el marketing saludable.

Los consumidores deben ser listos e impregnarse de toda esta documentación favorable para estar informados de los nuevos productos que salen al mercado y si son realmente sanos o todo forma parte de una publicidad engañosa. Con los influencers se podrá tomar nota de muchos trucos y de tachar alimentos que, en un primer momento, se creía que eran la mejor opción de alimentación.

Ventajas y beneficios 

Este tipo diferente de marketing que ha llegado para quedarse nos aporta muchas cosas positivas y necesarias en nuestro día a día, desde que la vida saludable es toda una tendencia en nuestros hábitos.  Son muchas las ventajas y beneficios que se encuentran en la publicidad saludable. A continuación se detallan algunas de ellas:

1) Conocimiento de productos nuevos. Hay marcas que tienen una gran cantidad de productos saludables, pero que resultan, en ocasiones, complicados de combinar o son demasiado novedosos para que sepamos cómo hacer recetas con ellos. Hay alimentos, como la quinoa o la soja, que hasta hace unos años no estaban integrados en la alimentación. Los supermercados comenzaron a apostar por este tipo de alimentos saludables, pero si los consumidores no conocen sus beneficios, no los compran. En ese caso, las marcas crean un canal de vídeos en YouTube o directamente desde Instagram para mostrar recetas sencillas con dichos productos. Gracias a toda esta promoción a través de influencers, vídeos de apoyo, profesionales del sector y campañas de publicidad, se pueden conocer estos productos y llevarlos a casa. Una forma fácil de llegar a los compradores para que se animen a consumirlos.

2) Influencers que promocionen los productos de la marca. En nuestro día a día estamos acostumbrados a ver cómo los influencers de moda nos cuentan sus hábitos alimenticios saludables complementados con unos hábitos muy sanos y la realización de deporte. En estos casos vemos cómo ellos mismos crean sus propios batidos, tortitas o infusiones con diferentes beneficios, dependiendo de las necesidades que cada uno pueda tener. Si los seguimos y confiamos en su criterio, es muy probable que adquiramos estos alimentos y empecemos a probar por nosotros mismos este nuevo tipo de alimentación.

3) Consejos de alimentación y vida saludable. Aparte de los consejos para utilizar los alimentos y las recomendaciones de los influencers, es necesario que existan consejos de expertos que expliquen para qué emplear cada alimento y cómo hacerlo. Por ello, desde dichos canales es importante implicar a expertos nutricionistas que se encarguen de recomendar los citados productos a los clientes potenciales. Que nosotros veamos desde nuestras casas los consejos que nos aportan estos profesionales nos va a proporcionar una gran confianza y un paso más para adquirir estos productos y empezar a consumirlos.

4) Un cambio en los hábitos. Aparte de implicar a un nutricionista, también se puede explicar por parte de un profesional del fitness o de entrenamiento personal cómo podría beneficiar este cambio de alimentación a los futuros consumidores. Una combinación de una buena alimentación junto a una vida sana y unos hábitos basados en la actividad física. Además de los cambios a nivel físico también podemos incorporar los cambios a nivel personal: implicarnos en los cambios que el planeta está sufriendo y comprender que también está en nuestras manos el cambio. Por ello, apostaremos por aquellos envases que se comprometen con el reciclaje, con la reutilización de embalajes y una apuesta por elementos que se disuelven más fácilmente que el plástico, por ejemplo. Un ejemplo de ello puede ser el cambio de las bolsas de plástico del supermercado por las bolsas reutilizables o la eliminación de los plásticos que unen las latas de refrescos sustituyéndolos por cartón reciclado que realiza la misma función.

5) Aprender recetas de cocina nuevas. No se trata solo de llevar el producto a casa sino de saber cómo cocinarlo. Para ello se despliegan numerosas formas de informarse sobre recetas de cocina sanas que incluyan estos ingredientes.

6) Confiar en las marcas. Si una cara conocida publicita una marca, ya es señal de confianza. Así es como muchas empresas han invertido parte de capital en campañas de publicidad con famosos para darse a conocer. Los consumidores, cuando vayan a comprar, se acordarán de ese anuncio y la marca que enseñaban e instintivamente la parte irracional empujará a comprar el producto.

7) Aprender a comer sano. Muchas veces es necesario que alguien dé unas pautas de alimentación para poder seguirlas. Con estos métodos innovadores de promoción, son muchas las personas que han aprendido a alimentarse de forma saludable dejando atrás alimentos explosivos como los fritos o los platos contundente de productos grasos, como el chorizo o el tocino. Hay infinidad de combinaciones de alimentos que se pueden hacer y que poco a poco, van cambiando los hábitos de alimentación.

Sin duda, el marketing saludable nos aporta una conciencia por parte de las marcas para acercarnos a un tipo de vida más saludable tanto para nosotros mismos como para el planeta. Estas marcas nos aportan una confianza y una visión diferente en ellas.

Gracias a esta tendencia la población se ha mentalizado de que hay que cuidarse y comer alimentos ricos en nutrientes y no en contenido calórico. Las marcas son las encargadas de emplear las estrategias adecuadas para la comercialización de sus productos y según datos estadísticos, merece la pena por los resultados que se están consiguiendo.

Y tú, ¿apuestas por algún producto o rutina saludable en concreto? ¡Cuéntanoslo!