¿Cómo podemos potenciar nuestro marketing digital para incrementar nuestros clientes y ventas en el mundo online? Evidentemente, es una cuestión capital para cualquier empresa. Y resulta imprescindible contar con una estrategia bien definida de marca, publicidad y SEO. Solo así estaremos en condiciones de alcanzar el éxito.
Los tres pilares del marketing digital
Nuestro plan de marketing siempre debe tener presentes tres elementos esenciales en la comercialización actual: la marca, la publicidad y el SEO. Vamos a analizar a continuación cada uno de ellos.
Comunicación que marca
La percepción corporativa y la reputación online se convierten en aspectos fundamentales para atraer, interesar y seducir a los clientes.
La comercialización es, ahora más que nunca, una cuestión de confianza, fidelidad y vínculos emocionales. Por ello, solo las marcas con un claro liderazgo, capaces de diferenciarse de sus competidores y de llegar con claridad, coherencia e impacto a cada uno de sus targets acabarán triunfando.
Todo lo que hacemos, incluso lo que dejamos de hacer, influye positiva o negativamente en esa proyección global. Como tal, es fundamental adoptar medidas estratégicas que primen el posicionamiento deseado.
Crear contenido visual e interactivo, encarnar los productos y servicios, tener presencia corporativa en las redes sociales, unificar la estética y el concepto de nuestras marcas y apostar decididamente por ellas son factores fundamentales en una buena estrategia de marketing.
Publicidad digital
Tenemos que empujar nuestros productos y servicios en el entorno digital. Los mensajes publicitarios nos permiten destacar de la vorágine informativa global y personalizar nuestras propuestas. Además, a menudo, es la única manera de acercarlas a nuestros potenciales clientes.
Existen muchas opciones publicitarias a nuestra disposición: la elección del soporte o los soportes indicados depende de cómo es nuestro público y dónde se encuentra.
Así, podemos escoger entre:
· Compra directa de espacios publicitarios en grandes soportes online, a través de banners, pop ups u otros formatos.
· Inversión en mensajes publicitarios programáticos, la cual se gestiona y concreta de manera automatizada.
· Apuesta por las apariciones publicitarias nativas, que vendrían a ser los nuevos publirreportajes digitales.
· Realización de email marketing. El correo electrónico, bien utilizado —por ejemplo, mediante newsletters— es un magnífico cauce.
· Aplicación de retargeting, es decir, espacios publicitarios que nos saltan después de haber visitado ciertas webs, productos o servicios.
· Presencia en Social Ads, mediante la contratación publicitaria en las distintas redes sociales.
· Posicionamiento SEM, utilizando Google Ads.
· Conexión publicitaria mediante influencers.
Posicionamiento orgánico o SEO
El tercer campo imprescindible de trabajo es el posicionamiento natural. Es decir, que cuando alguien busque información sobre determinados productos, servicios o sectores, sean nuestros contenidos digitales los que aparezcan en primer lugar.
Es el mejor camino, sin duda, para llegar en óptimas condiciones al público objetivo. Para conseguirlo, debemos trabajar el inbound marketing y apostar por la creación de contenidos de calidad, pensados para cada buyer persona en la fase concreta del funnel de conversión en la que se encuentra.
Tres eslabones de la misma cadena
Trabajar aisladamente estos tres ámbitos es un gran error en marketing porque forman un todo único y sinérgico. Ensamblar nuestros objetivos y políticas de acción en las tres áreas es sinónimo de conseguir mejores resultados.
De este modo, las marcas fuertes con estrategias publicitarias digitales bien definidas y un content marketing excelente mejoran integralmente en cada uno de estos aspectos. Y, por supuesto, obtienen mejores resultados integrales.
El efecto es 100 % sinérgico: la confianza en la marca aumenta, la publicidad es más efectiva y el posicionamiento SEO se optimiza gracias al efecto global positivo.
¿Qué opinas sobre este combo del marketing digital?
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