La difusión de la técnica del código QR corre paralela a la que ha tenido lugar con los teléfonos inteligentes. Estos dispositivos, por estar dotados de cámaras, prestan una ayuda a la hora de introducir datos por medio de aplicaciones. Así, las limitaciones de espacio para el teclado encuentran una nueva vía de entrada de información.
Por medio de aplicaciones lectoras transforman una imagen bidimensional en una cadena de texto aplicada a distintos propósitos. Sin embargo, esta tecnología viene desde hace tiempo y sus aplicaciones prácticas aún tienen posibilidades poco exploradas.
Historia de la herramienta de moda en el marketing móvil
El precedente de este código se encuentra en el código de barras. Es la representación de 20 caracteres alfanuméricos por medio de un gráfico muy simple.
Compuesto de franjas de colores alternos de anchuras desiguales y representó en su día un gran avance que todavía mantiene.
Liberó a millones de operadores de almacenes y del comercio de introducir el nombre del producto en inventarios, recuentos o ventas. Los primeros TPV (terminal de punto de ventas) aparecieron con esta funcionalidad y facilitó que se hicieran tan populares en poco tiempo.
Pero los 20 caracteres pronto resultaron insuficientes. Fue en Japón donde surgió esta necesidad de una forma más acuciante. La codificación especial de su forma de escritura y la expansión de la industria hacían necesarios medios más capaces de registrar datos.
Los primeros prototipos aparecieron en la última década del siglo pasado y fueron aplicados a las cadenas de montaje de la industria automovilística.
El auge de la telefonía móvil y los smartphones hizo recuperar esta tecnología para hacer más cómodo su empleo. Principalmente, las tareas que requieren registros y órdenes por teclado en minúsculas pantallas táctiles.
El marketing movil ha recurrido a estos gráficos para diversos fines como por ejemplo:
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Presentar productos
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Anunciar ofertas
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Promover la participación de los clientes en eventos
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Suministrar información adicional
La tediosa tarea de introducir largas cadenas de caracteres alfanuméricos encuentra aquí una alternativa muy provechosa ya que ahorra tiempo y minimiza errores.
Funcionamiento y empleo de los códigos QR
Como hemos dicho anteriormente estamos hablando de una técnica de representación de la información inspirada en los códigos de barras. Si en estos el código resultante se dispone en una dimensión, para el que nos ocupa empleamos dos.
El espacio contenedor tiene forma cuadrada para distinguirse claramente de otras elementos que puedan acompañar a esta señal gráfica.
En el símbolo QR hay partes que son comunes a todos y otras que son distintivas de la información que portan. Los comunes son tres cuadros de posición y cuadro de alineamiento y dos líneas de sincronización. No tienen otra finalidad que facilitar el reconocimiento del aparato lector. También aparecen junto a los datos y registros de corrección de errores la información de la versión utilizada y la información del formato.
A diferencia de los códigos de barras, los contenidos pueden estar destinados a acciones concretas prediseñadas. Suponen un ahorro de esfuerzo, rapidez de acceso y seguridad en la toma de datos.
Acciones concretas que pueden realizar estos códigos:
1. Abrir URL en un navegador.
2. Contenido textual similar a un post en una red social.
3. Enviar correo electrónico con una configuración completa de destinatario, objeto y cuerpo del mensaje.
4. Enviar mensajes cortos telefónicos. Los famosos SMS para participar en alguna encuesta o toma de posición.
5. Marcado de número de teléfono para hacer llamada.
6. Geoposicionar una localización. Muy aplicados en el sector turístico.
7. Registro de eventos para una agenda o calendario.
La posibilidad de crear un código personalizado para un uso particular se materializa a través de software especializado o por servicios online al efecto.
Para la lectura la oferta es todavía mayor: cientos de aplicaciones para todos los sistemas operativos interpretan la información gráfica recibida por medio de la cámara.
¿Qué beneficios tiene para el Marketing?
Se ha descubierto el potencial que tiene el teléfono móvil para el comercio electrónico.
También se reconocen las limitaciones del dispositivo para la navegación ágil y cómoda. Estos códigos pretenden facilitar el éxito de una llamada a la acción del público al que se dirige una oferta. La aplicación lectora del smartphone hace de puerta de acceso a un contenido útil y creador de marca.
Las promociones que se anuncian en los productos tienen una finalidad esencial. Va más allá de incorporar una fuente de información adicional a través de alguno de estos códigos. Se trata, sobre todo, de relacionar en la mente del cliente el servicio o producto comercializado con el uso avanzado del dispositivo móvil.
El consumo de información por medio de dispositivos de bolsillo no ha hecho más que crecer en los últimos años. La garantía de proximidad e inmediatez abren un abanico muy amplio de posibilidades para vendedores y anunciantes. Es lógico querer llevar la tienda al contacto permanente con el cliente, acompañar su actividad cotidiana.
Nos gustaría conocer tus experiencias sobre esta tecnología y sus posibilidades óptimas para el marketing, ¿nos las cuentas?
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