El vídeo se está consolidando como el rey del contenido online, y esta posición privilegiada trae también aparejada la supremacía de otra tendencia del marketing online: el social broadcasting. Saber en qué consiste y su evolución es esencial para entender el futuro de los contenidos sociales online.
Definición de social broadcasting
Esta tendencia de marketing online se define como la emisión de vídeo, texto e imágenes hacia una audiencia concreta, siempre a través de los canales habituales de social media, como Facebook o Instagram. Es decir, consiste en hacer llegar contenido de interés a los usuarios sin usar los medios tradicionales de radio, televisión y prensa.
¿Cuál es la gran ventaja de transmitir contenidos a través de los social media, en lugar de los medios de comunicación tradicionales? Esencialmente, que permite su llegada directa a los usuarios que realmente interesan a una marca o un sector.
La realización de social broadcast requiere de equipos profesionales de calidad de imagen y sonido. Con estas herramientas y contenidos de valor, se pueden producir programas comparables a los que se emiten por televisión.
Uno de los factores clave del social broadcasting es la posibilidad de emitir en directo videos que se han preparado previamente o, incluso, pregrabado. De esta manera, las emisiones tienen un paralelismo importante con los programas de televisión. Incluso los contenidos en streaming pueden ser reemitidos.
Uno de los mayores beneficios que te ofrece el social broadcasting es la posibilidad de tener un acceso directo a los consumidores, lo que beneficia el intento de su conversión positiva. Hay que tener en cuenta que esta técnica de marketing online permite controlar directamente a quien está viendo el streaming.
El tradicional hábito de ver la televisión ha evolucionado en los últimos años, y se ha ido convirtiendo en lo que se conoce como la PSVE: Experiencia de espectador seleccionado y personal. Es decir, cada persona ve lo que quiere ver, cuándo y cómo quiere. Nada que ver con el horario de toda la vida para ver los programas de televisión.
La norma general es hoy en día el consumo de social media en el móvil, que ha llegado incluso a desplazar a la televisión de la sala de estar. El cambio de la tele por el social media ha hecho que sea necesario ofrecer a la audiencia contenidos adecuados para conectar con ella. Es por esta razón que el social media se está convirtiendo cada vez más en social broadcasting.
Opciones para el social broadcasting
Aplicar esta tendencia de marketing online pasa por aprender a trabajar con una serie de herramientas hasta ahora, cuanto menos desconocidas para los expertos community managers tradicionales.
Facebook ha apostado ya hace tiempo por el vídeo en directo, tomando el testigo del lanzamiento inicial de Snapchat. También las populares Instagram stories se basan en un principio de marketing muy parecido.
¿Por qué el éxito de estas emisiones de vídeo en directo? Muy sencillo: su producción representa un coste prácticamente cero. Cualquier persona con un Smartphone con cámara de cierta calidad puede hacerlo sin problema, recurriendo a cualquiera de las aplicaciones de su móvil.
¿Más puntos a favor del social broadcasting? Sin duda, la tendencia actual de hacer vídeos muy sencillos, con personalidad propia. Tan solo es necesario saber qué se quiere contar para empezar a hacerlo, sin estrellas ni efectos especiales. Solo se necesita tener ganas de explicar cosas.
El potencial de estos formatos se está tan solo empezando a estudiar, pero la posibilidad de crear piezas espectaculares de 15 segundos con contenidos divertidos que se desvelan en tiempo real es realmente ya un motivo importante para enganchar a la audiencia.
Las videoseries pensadas para ser emitidas en este tipo de formato pueden ser también una opción con gran potencial.
Igualmente, los gifs y piezas animadas son otra gran opción de contenidos dentro de este entorno audiovisual. Loops, boomerangs y, sobre todo, gifs son una garantía de éxito en su aplicación dentro de una estrategia de contenidos.
Por supuesto, tampoco pueden faltar en esta lista de opciones las píldoras de vídeo. Con una duración de hasta 60 segundos, han representado un boom en el ámbito del marketing, sobre todo porque son una herramienta muy aplicable dentro de los contenidos con enfoque didáctico. Aunque requieren más trabajo y presupuesto que las opciones anteriores pueden seguir saliendo económicas si se recurre a bancos de imágenes gratuitas.
De todos modos, tampoco hay que olvidarse de las producciones de vídeo convencional. Aunque son más elaboradas y tienen un precio superior a la mayoría de técnicas usadas en esta tendencia de marketing online, la inversión realizada puede ser indispensable para solucionar algunas necesidades de comunicación.
¿Lo usas ya en las campañas de marketing online de tu empresa? ¿Cuál es tu opción preferida para la creación de contenidos a transmitir en vivo en tus redes sociales?
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