Instagram, ha tenido un vertiginoso crecimiento, desde que Kevin Systrom y Mike Krieger supieron aprovechar el momento que el desarrollo tecnológico ofrecía en 2010. Las ventas crecientes de smartphones, con grandes capacidades para la fotografía, inspiraron la creación de Instagram como una aplicación de gran éxito. Esta permitía trasladar de forma cómoda, rápida y efectiva la producción de imágenes a una nueva red social. La imagen o el vídeo bien editados con filtros y etiquetados sustituían a las funciones predominantes que la voz y el texto tienen en otras redes sociales.
A día de hoy sigue teniendo éxito y como otras redes sociales, ha creado multitud de términos que aluden a alguna característica o función propia. Shadowban es un ejemplo, que además despierta curiosidad porque afecta al crecimiento y a los objetivos de una cuenta de usuario.
Qué es shadowban
La gestión diaria de las redes sociales por sus compañías promotoras se orienta por cuestiones legales y objetivos estratégicos. Para Instagram es fundamental mantener la calidad de sus contenidos. Existe el peligro del mal uso que algunos usuarios puedan hacer de sus cuentas para un beneficio propio. Pero la automatización de acciones es un peligro aún mayor en plataformas donde la inmediatez de la imagen puede producir efectos virales.
El shadowban viene a ser como una penalización suave, desde luego menos que el bloqueo de una cuenta. El principal efecto es que desaparezcan las publicaciones en los resultados de las búsquedas aunque vayan perfectamente etiquetadas. Da igual que estemos utilizando el mismo hashtag de la búsqueda, la publicación de la cuenta de esta forma penalizada no aparecerá entre los resultados. De este modo puede comprobarse si una cuenta está siendo afectada por esta acción preventiva.
Para evitar el shadowban es fundamental conocer las normas de usuario y políticas aplicadas. La actualización periódica en los cambios efectuados por la compañía puede evitar sorpresas desagradables. No es infrecuente que esta penalización se produzca por causas ajenas a la voluntad de engaño o fraude del usuario. El empleo de herramientas de terceros para la automatización de acciones es una causa muy frecuente.
También ayuda a estar a salvo de estas penalizaciones reducir al máximo acciones que resulten poco naturales. Una actividad desacostumbrada en una cuenta, la incoherencia entre hashtags (de temáticas muy variadas) o las denuncias de otros usuarios son posibles causas que también deberemos considerar.
El blindaje de las redes sociales
En definitiva, todas las redes sociales pretenden protegerse del mal uso por parte de algunos usuarios. El Instagram shadowban es una medida orientada a este fin. La experiencia con las cuentas de empresa, por el número de casos, resulta aleccionadora.
Seguro que tienes alguna anécdota sobre este tema...así que ¡coméntanos!
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