El hybrid marketing pretende reunir en una sola metodología, técnicas llegadas del marketing tradicional y del marketing digital. En ambas orientaciones encontramos herramientas de probada eficacia para la actualidad.
La idea fundamental es combinarlas para alcanzar el objetivo de ocupar o consolidar un sector del mercado en un proyecto empresarial o de emprendimiento.
El marketing admite tantas definiciones como subdivisiones. Estas distinciones apuntan a la complejidad de los procesos de crear, comunicar e intercambiar bienes y servicios.
Así que debemos acostumbrarnos a denominaciones que inciden sobre un planteamiento de interpretar el público objetivo y encontrar la mejor forma de llegar a él con una propuesta comercial.
Las estrategias de marketing, habitualmente promovidas desde el comercio tradicional, ya se encuentran muy influenciadas por las posibilidades que ha abierto internet.
Ahora no pretendemos coordinar el ámbito tradicional de tienda física con el ámbito digital de la tienda online. Se trata más bien de integrar los puntos de venta en un único plan para llegar al público con nuestros productos y servicios.
Combinación entre técnicas de marketing: Las innovadoras y Las de siempre
En una agencia de viajes la información, las gestiones administrativas y las económicas se realizan del mismo modo, tanto en venta de paquetes turísticos por internet como en visita a las oficinas abiertas al público.
Es una confluencia natural que, de forma progresiva, se traslada en todos los sectores de la economía. Las redes sociales se convierten en una herramienta para establecer vínculos de fidelización y creación de marca entre los clientes de una firma.
Algunos gurús del marketing suelen decir que una empresa es una máquina de hacer y conservar clientes. Aunque existen muchas actividades en una empresa que son ajenas al mercadeo, se pone de manifiesto que el marketing puede convertir esas mismas actividades en un activo valioso para la promoción y la creación de marca.
Con el hybrid marketing, en definitiva, se fusionan técnicas de marketing de origen diverso que mantienen vigencia en los tiempos actuales. La principal virtud de esta fusión es que se refuerzan mutuamente en una sinergia de esfuerzos orientados al objetivo esencial del marketing, sea cual sea su apellido: promover una venta.
Los procesos publicitarios digitales
El uso comercial de internet apareció casi desde sus mismos orígenes. Los modos de relación entre anunciantes y consumidores han adquirido unas cualidades de rapidez, sencillez y economía inimaginables, desde mediados del siglo pasado.
Al mismo tiempo los cambios sociales producidos han dado un poder y protagonismo al consumidor como no lo ha tenido nunca. Ha cambiado sustancialmente la forma de concebir productos, el modo de crear marcas y la factura de las campañas publicitarias.
Las estrategias de comunicación están condicionadas por los medios empleados para difundir contenidos y recibir respuestas.
Si la radio y, décadas después, la televisión supusieron un cambio radical en las formas publicitarias, un cambio aún mayor se da con la irrupción de internet en todo tipo de dispositivos y plataformas.
Hoy, las redes sociales son un espacio público en evolución constante donde se forman estilos de vida, criterios de calidad y deseos de compra. La creación de marca es un paso obligado para diferenciar una propuesta comercial de la competencia.
Internet permite medir con cifras factores cuantitativos que intervienen en las interacciones. Es una comunicación bidireccional que repercute en las decisiones que afectan a la forma de presentar un servicio o producto en el mercado.
El consumidor participa así en la creación de propuestas comerciales adaptadas a los gustos, las preferencias y deseos libremente manifestados.
El marketing actual se construye con métricas precisas que asignan un valor numérico a los factores que indican en la red la distancia entre la situación actual y los objetivos planteados. La creatividad de los equipos profesionales dedicados a los estudios de mercado deberán facilitar los caminos para llegar de un punto a otro.
La economía long tail y el comercio electrónico
El nuevo rol del consumidor hace del comercio electrónico una nueva herramienta de comunicación. La popularidad de las compras en internet convierte a este medio en un canal de distribución minorista de uso masivo. Como consecuencia, los hábitos de consumo se independizan de las ofertas de los centros de comercio estrictamente locales.
La economía long tail ha dejado el modelo anterior, cuando el 80 % de las ventas representaban el 20 % de los productos. El servicio y el producto con mercado minoritario vuelven a ser rentables, gracias a las ventajas de la tecnologías y comunicación que sostienen internet y el desarrollo de la logística.
Un buen nicho de mercado no precisa una demanda elevada. El alcance global, la especialización y destacar sobre la competencia pueden construir un rentable plan de negocio sobre demandas minoritarias, pero bien definidas.
Al tiempo los negocios tradicionales en los que predomina la importancia de productos y servicios de gran demanda pueden utilizar estos mismos medios para ampliar los fundamentos del negocio sobre bases más sólidas y actualizadas.
El sector inmobiliario ha visto surgir servicios de intermediación en ventas y alquileres muy eficaces, sobre la base misma de un negocio tradicional. La capacidad de las redes sociales para el diseño de campañas publicitarias de muy bajo coste permite un aprendizaje continuo sobre los sistemas que dan mejores resultados.
Es identificar a los clientes o potenciales clientes y establecer un diálogo con ellos sobre sus gustos, deseos y necesidades.
Las posibilidades que ofrece el comercio electrónico también se deben a la variedad de partes que pueden intervenir en una transacción.
Las webs que ponen en contacto a particulares para intercambiar productos o servicios por otros o por una retribución económica son una de ellas. El comercio entre empresas es otra con un futuro muy prometedor. Hasta las instituciones públicas y privadas participan en esta puesta en valor que la tecnología permite.
La fórmula de venta online que iguala en forma de ecuación una venta al producto de visitas multiplicado por tasas de conversión y por pedido medio, es el arranque de una nueva visión del mercado. La combinación de técnicas de publicidad tradicional sobre medios de comunicación y redes sociales, junto con las métricas web, son las bases de hybrid marketing.
¿Qué te parece esta nueva técnica? ¿Ya la conocias? Nos gustaría oir tu opinión.
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